jueves, 23 de junio de 2011

APRENDIENDO A VOLAR...

Quiero aprender a volar, surcar los cielos,
Inmensos remansos de paz eternos;
Con ese pensamiento me he levantado esta mañana,
Con la idea absurda de volar sobre los infiernos
De esta vida insulsa y apocada.

Aprender a volar, ilusorio sueño
No al alcance de cualquier mortal,
Pero qué dicha inmensa tocar las nubes
Y atravesar en el aire cualquier portal
Al tiempo que de alegría te consumes.

Ay, pero no tengo alas para volar
Ni membrana natural para aletear al viento;
Estoy a la tierra pegado
De facto y de pensamiento…
Sólo me queda soñar.

Pero yo, resoluto, quiero aprender a volar,
Quiero jugar con las nubes allá en lo alto,
Dormir en ellas, saltar
Y llegar dónde nadie ha llegado…
Sobrevolar cada noche tu tejado.

Quiero aprender a volar, bendita locura,
Para acercarme a tu ventana
Cuando brille la luna,
Cuando por fin luzcan las estrellas
En la noche desesperada
Compitiendo entre ellas.

Ay, que volar quiero
Por llegar a tu alcoba
Una noche de luna,
Una noche de bruma
Fresca como las amapolas.

Kalaxmar 2010

miércoles, 22 de junio de 2011

PECADO



Pensar en tus labios, mi Dama,
Es morir al punto sepultado
Con esas dos dagas clavadas
Al ritmo que marcan estos versos
Dolorosos, lo que nunca he logrado…
Olvidar, mi Dama, tus labios perversos.



Y escucha presto el murmullo marchito:



Tienes el Alma de Luna marcada
En este derroche que vengo a traerte
Noche sin fin, noche pausada,
Tiránicos sueños de loco mendigo
Ante la puerta misma de la torre empedrada,
Canción siempre plena de Pena,
Ignota Pesadumbre parcamente  engalanada…
Otra Noche más que el incierto Destino
No tiene poder para acallar la fuerza de tu mirada.


ANTITESIS



Cantos de Noche, llantos de día,
Sonrisas y lágrimas en la vaguada de la vida
Al tiempo que miras y me miras,
Me sonríes y te eclipsas con deleite
Esbozando un desdén sin temple.

Amiga de Noche, enemiga de día,
Juegos de azar en la alcoba de tu vida
Mientras me mientes con dulzura
Y te vas quitando despacio los velos
De tu conciencia ya marchita,
Deseos, veleidades, tan sólo sueños…

Lasciva de Noche, casta de día,
Entregas tus encantos a quién quieres
Rimando entre las olas de tu pelaje
Imposibles versos de amor prohibido,
Amor veleidoso, amor conciso,
Amor al fin que cobra peaje
A todo aquel que queda seducido.

Viva de Noche, muerta de día,
Llantos que cruzan la Oscuridad de tu vida
Y la luminosidad de tus juegos,
Esos mismos juegos que ambos hemos probado
Y que tan amargos para ambos fueron;
Yertos desde entonces y apocados
Yacemos delante del espejo.

Sombra de Noche, estatua de día,
Vanos deseos incumplidos que llevarse a la tumba
Y retumba en mis oídos tu nombre
Nunca por mí pronunciado, se esconde
Tras la puerta corrediza que disfruta
Machacando nuestros oídos con sus fieros chirridos
E, invicta, huye en la Noche.

Kalaxmar 1998 - 2004

ANTES DEL ADIOS



Antes del adiós, la aventura;
Antes del adiós, la locura;
Antes del adiós, la ternura;
La luz de la Luna promete
Y la canción del mar promueve
Porque…

Antes del adiós (tu poesía, los lamentos),
Improviso (sonidos a través del largo camino);
Antes del adiós (en el otro lado del Viento),
Una sonrisa (en el otro lado de la Luna);
Antes del adiós (tus sueños fueron míos),
El Paraíso (estando a tu lado);
Leímos los signos (antes de decirnos adiós),
Y casi alcanzamos la inmortalidad…

Y la Noche es un río donde se esconde el sol,
Mi cuerpo es el barco en el timbre de tu voz,
Sonidos de desafíos vibrando por nosotros
A la mágica luz del Ocaso
Porque…

Antes del adiós (me devolviste mis poemas),
El Dolor (en tus ojos las lágrimas);
Antes del adiós (había secretos mohines),
La sospecha (en el reverso del amor);
Antes del adiós (donde te escondiste),
La imperfección (in libro de tristezas);
Divididos en dos (y la música silenciosa)
En el lánguido recuerdo…

El azul del cielo ya no es real,
La magia circundante es ya sólo ceniza,
La sombra de ansiedad crece en tus ojos
Y el dolor invade toda música…

Antes del adiós, la nostalgia…

© El Hombre sin Sueños 2004

AMAPOLAS SOLITARIAS


Amapolas solitarias
Son tus ojos que me miran,
Que me sonríen,
Que me tientan sin cesar
Arrancando agónicos mi vida
Y, a la par de su cuidado,
Mi corazón ensangrentado,
Llora su amarga canción.

Ciervos jóvenes al viento
Bramando su aroma,
Sintiendo la tibia tarde
Caer sobre sus lomos de amapola,
Y al Alba sin demora
Alzando su hocico enhiesto
Tus cabellos se me antojan
Muriendo yo por ellos.

Caballos blancos que me persiguen
Con denuedo, sin descanso,
Y en la ausencia de pasto
Mi vida acaban tomando
Como premio a su sinrazón,
Y así tus dientes blancos,
Con sazonada plata perlada,
resquebrajan mi razón.

ALAMBRADA


En una tarde invadida de púrpura y luz,
Bajo los frondosos castaños florecidos,
Sobre el umbral polvoriento de la vida,
Los días transcurren como hoy y como ayer.
Es tanta la belleza de sus frondas florecidas,
Y aún de sus troncos con sus nudos y sus años,
Que casi temo contemplar
Sus copas verdes y doradas.

El sol ha extendido un velo de oro
Tan hermoso que me duele el cuerpo,
Y al mirar el intenso azul del cielo,
Conmovido, por error, he sonreído.
El mundo está en flor y parece sonreír,
Quisiera volar, mas a dónde y a qué altura?.
Si en esta triste alambrada las rosas pueden florecer,
Por qué no podré yo?. No me rendiré!.